Darme el Regalo de la Experiencia
Agradecimientos y el Salto de Consciencia con el que inicio mi viaje a India
Cuenta Regresiva < Hoy tomo el Vuelo a India>
ANANTA FEB 2025 - YTT EN VARKALA, INDIA
Escribo esta carta a las 7:15am (Hora CDMX) desde mi nueva libreta de ideas que tiene los stickers de los pilares de Zåjni: Constelaciones, Ermitaño y Polaris. Mi asiento en la 12va fila del avión viene con la gran libertad de poder estirar mis pies, que el lugar de a mi derecha viene vacío y con la ventanita de mi lado izquierdo con vista hacia el amanecer. Un asiento que no seleccioné de antemano, pero que el universo colocó a mi favor para comenzar este viaje con la mayor comodidad posible.
Estaré +27hrs en traslado y lo mejor de todo, muy bien acompañado por mis nuevas amigas yoguis con quienes compartiré la certificación y con quienes he estado planeando el viaje posterior a India. Vamos los 5 en el mismo vuelo y estaremos el uno para el otro contando nuestro nerviosismo, emoción y chisme necesario para convertirnos en un grupo muy unido.
Ellas ya me bautizaron “Clementina” jajaja, más si quieren saber porqué, tendrán que esperar al episodio que en un par de semanas saldrá cn una invitada chilena que tendré en mi podcast: Saltos de Consciencia; que claro cuando lo grabé no sabía de este atinado nombre, más sí menciono cuál es la historia de esta mujer que hoy presenté a mis compañeras de viaje mientras contábamos de nuestras vidas, amores fallidos, temáticas astrológicas, y más.
Bueno, ya no me desviaré tanto del tema principal de este escrito. Lágrimas de alegría y gratitud brotaron al despegar el avión, consciente del momento presente y recordando esos viajes de años atrás cuando he volado hacia otras rutas auténticas para descubrir o conectar con mi propósito.
Esta es “la portada del libro” que presenta esta reflexión que se siente com el inicio y el fin al mismo tiempo. Un punto en el infinito en el que me veo, desde el reflejo de la ventanita, dando un salto de fe. Les decía a mis amigas al hacer el check-in que la primer parte, “el salto”, ya lo estamos dando y que “la fe” es lo que encontraremos, tendremos y sosteneremos allá juntxs. La fe, será una constante en esta aventura, una a la que me acercó mi intuición, que el universo confabuló para presentármela hace 9 meses y que se ha ido transformando en un llamado del alma que he atendido al nutrir mi fortaleza, mi calma, mis convicciones e ideales.
El infinito, el regalo que en el fondo representa esta experiencia, ese Ananta de total expansión y unidad. Un regalo que se siente vivo por ese fuego, Agni, que cada día se activa más y más aunque las inquietudes recientes y sombras del pasado quisieron aislar su calor y apagar su luz.
Un regalo que me he dado con mucho esfuerzo (consciente) para sostenerlo desde lo económico y con mucho amor luego de casi 4 años desde que empecé a practicar yoga y volverlo parte clave de mis procesos más íntimos, reveladores y catalizadores. No pasaba por mi imaginación que, 3 años después de tomar mi primer clase —vía instagram, estaría diciendo un sí absoluto a mi maestra y confirmándole que vendría a la India. Es más, hoy no cabe en mi razón que estaría dando ese salto de fe, atendiendo el llamado de mi alma, conectando con estos sentimientos desde la magia de la presencia y en completa alineación con mi propósito. En si este regalo, en su “forma” física y emocional, es un Salto de Consciencia (curiosamente mientras transcribo esto a mi laptop vamos cruzando una zona de turbulencias) que es justo lo que quiero provocar que den aquellas almas afines a quienes les resuene y anhelen experimentar algo similar.
Darme el regalo de esta experiencia todavía tendrá sus sorpresas, eso es lo más emocionante. Sé que vendrán de formas inesperadas que me sacudirán tanto que todo aquello a lo que pudiera seguir aferrado lo llegaré a soltar, que todo aquello que he intencionado brotará en ese jardín en el que habitan varios deseos de mi corazón, que todo aquello que la curiosidad despierte sé que iré con total apertura y gozo a vivirlo, ya sea que traiga consigo desde su dualidad y polaridad.
Este regalo no sería posible sin personas clave que han envuelto con papel brillante y han colocado un moño al empaque de éste. Por ejemplo, mi equipo de trabajo, Moni y Bren, con quienes damos consultoría y soporte técnico a emprendedoras con negocios digitales conscientes; que con empatía y sacrificio han hecho todo a su alcance para que pueda dedicarme a estar presente en la certificación, que al reconocer mis dones y mi narrativa interna (y yo los de ellas) han creado oportunidades para que mi potencial siga creciendo a la vez que brindan un respaldo económico y operativo para que disfrute esta etapa como nómada digital.
Otra persona importante sería mi terapeuta, Marce, quien ha sido una gran guía, portadora de sincronía, sembradora de abundancia, y canalizadora de mis epifanías emocionales más importantes desde agosto 2023. En especial quiero agradezcerle por esa abundancia que ha mostrado que tengo a mi alcance desde meses antes de tomar este vuelo. De hecho el título de esta reflexión también fue inspiración de su parte en nuestra última sesión. Gracias a su fe y confianza en mí, desarrollada en más de 30 sesiones, es que he sido capaz de no caer en viejos patrones de autosabotaje y tal vez haber ni siquiera considerado las posibilidades de decir que sí a un nuevo salto de esta magnitud. Más Marce ha logrado que reconozca en mí cada evolución, cada señal de que el universo me sostiene, cada oportunidad que he tomado desde mis rutinas consciente para honrar mi esencia y emprender este viaje.
Más personas especiales a quienes agradezco es a mi familia: mis papás que aunque temen por mi seguridad y se preocupan por mi bienestar pues apoyaron mi decisión y contribuyeron de mil formas para que hoy pudiera tener todo a mi favor en este momento en que abro mis alas. Mis hermanos que con curiosidad han visto de cerca cada unos de mis saltos, que les da gusto y brindan ese apoyo emocional que me ayuda a navegar cualquier tormenta o hacer frente a cualquier ola. En especial dedico este agradecimiento a mi hermana menor que incondicionalmente me ha brindado todo su amor y protección para que siga cada ruta de mis sueños, no importando qué tan locos o diferentes se vean porque ella sabe que esos sueños han estado destinados a encontrarme y convertirme en un ser que se apasiona y se pone al servicio de otros desde su máxima expresión posible. Y ni qué decir de mi sobrino, con quien convivo día a día! ese niño que me recuerda el juego, la chispa, las infinitas posibilidades cuando veo en sus ojos toda capacidad de asombro, crecimiento, sensibilidad y manifestación de una vida que sé que yo en un futuro también podré regalarle como su padrino, tío, “gemelo”, amigo y consejero. Lloré mucho al despedirme de él hace un par de días cuando lo llevé a su escuela, tan sólo recordar abrazarlo e intentar decirle con mi voz quebrándose cuánto lo quiero hace que de nuevo mi corazón exprese (con lágrimas) cuánto extrañaré su presencia.
Y por último pero no menos importante, quien me ha regalado esta experiencia de Ananta, mi maestra de yoga Andrea, a quien ya he mencionado tanto en diversas cartas porque nunca será suficiente mi agradecimiento y admiración por toda su maestría para conmigo (y claro! para quienes son sus alumnxs). Con su propósito, su autenticidad, su “magia de hada del bosque” fue que me rescató con ligereza y compasión de mis momentos más vulnerables. La práctica de yoga que me enseñó es una raíz tan profunda en mí que ha sido gracias a ella que mi luz volvió a brotar y logré de nuevo brillar desde mi esencia. Con Andy como mi guía he aprendido a honrar mi curiosidad con el corazón abierto, a sentirme flexible y fuerte estando o no en balance dentro o fuera del tapete, he aprendido a intencionar cada cambio significativo y también diseñar una vida sin prisa. Hoy no hay manera de ver la vida de otra manera e inspirarme con su ejemplo a vivir una vida llena de vida en cada respiro, cada caída, cada logro, cada frustración, en cada expresión maravillosa de mi cuerpo que sabe que se siente uno con el universo cuando elige cumplirse su palabra. Ah! y sin olvidarme de que Andrea despertó hace un par de años a mi escritor intuitivo que durmió por años dentro de un caparazón alejado de su creatividad y que gracias a sus journal prompts es que hoy estoy en este espacio digital contándote cada una de estas palabras.
Ananta, Agni, Fe, Saltos de Consciencia, es lo que hay dentro de este regalo que con Dios he co-creado y que con mi tribu he elegido compartir. Hoy creo que tendré mucho que integrar pero, a diferencia de otros procesos transpersonales, esta vez presiento que lo haré en un inicio desde lo individual. Y déjame decirte que esto se siente como algo nuevo, porque el Ermitaño que represento pareciera que se va a ir por primera vez solo con su linterna y bastón a unir los puntos de nuevas constelaciones mientas no pierde la dirección que marca su Polaris. Antes este arquetipo que encarno, primero vivía en compañía sus transformaciones para luego ir a su solitud a integrar las experiencias y regresar posteriormente con cierta luz y sabiduría que compartir para el camino de otrxs.
Ojo, no digo que en este viaje no contará con compañía, es claro que en el viaje que hace hoy cuenta con una tribu que nunca lo dejarán caminar solo, a lo que me refiero es que mucho de lo que toma consciencia y comparte con naturalidad a través de sus dones ha tenido un origen en aquellas historias compartidas que le inspiran a innovar lo que ya no funciona y guiar a otras almas afines (o entorno) a su mejor versión posible.
Hoy la diferencia está en que es mi turno, y obvio, de mi ermitaño. Ya no me toca estar guardado en mi ermita, en mi cueva, en mi lugar seguro de solitud donde potencio también mis dones. Me toca y quiero estar recorriendo mi camino y guiando a otros. ¿Cómo? contando mi historia desde un lugar más profundo, desde una energía que otros no compartirán de la misma manera que yo (porque cada quién en este mundo es un ser singular y se expresa distinto), desde una perspectiva que viene del poder que gana uno al resignificar su narrativa interna y contarla desde una visión de impacto, dando la luz que este año “9” me invita y me representa para guiar a que otros den aquellos pasos que se sientan correctos desde la fe, sus intenciones y sabiduría interna en sus transiciones, en sus cierres de ciclos, en sus nuevos comienzos. Esa narrativa, ese storytelling consciente que siento que se encenderá su poder una vez que de lugar a compartir cómo voy viviendo esta aventura y ser ejemplo de un fuego, un brillo, un calor que cada quien también puede descubrir en sus corazones una vez que elijan darse el regalo de una experiencia que les lleve al infinito cuando con amor y paciencia den su propio salto de consciencia, a su manera, a su ritmo, a su momento.
Me fascina que no tengo idea de qué tratarán las siguientes cartas de esta sección. Tal vez te cuente de mis clases, de mis desafíos emocionales, de mis aha moments! o despertares espirituales que me tendrán escribiendo sin parar en mi journal y en este lugar que he creado en Substack desde hace más de año y medio. Así que te invito a que con curiosidad sigas este viaje hacia el infinito, porque te prometo que lo que habrá será algo que tu cuerpo, tu mente y alma van a querer recibir con el corazón abierto y con ganas de expandirse, aunque sea a la distancia.
Me despido no sin antes agradecerte por acompañarme desde que te di a conocer mi salto de fe y desde cómo viste brotar la intención que hoy da sus frutos en esta carta, en este vuelo, en este momento mágico de una vida que gracias al yoga hoy tengo la bendición de disfrutar.
Te mando un abrazo desde el avión.
- Josh, Namasté.
Si apenas descubres de qué va este viaje hacia el infinito, te invito a leer también estas cartas que cuentan un poco más cómo es que llegué a esta reflexión:
Que hermoso saber de ti nuevamente con esta hermosa noticia!! Aún recuerdo cuando este salto
De fe era parte del
Futuro y hoy ya es tu presente🤩🤩🤩 gracias por compartirnos todo lo q vas sintiendo y cómo empieza este viaje muchísimas bendiciones, goooozalo💜
Te mando un abrazo gigante
Hermoso Josh, como ya te han mencionado, en la carta se siente toda la emoción que sientes sobre esta aventura. Y del otro lado también estamos emocionados por ti (y contigo). Que las bendiciones te sigan acompañando 💫
¡Un abrazote !